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Algunos de los objetos celestes visibles en el cielo en los hemisferios sur y norte en septiembre. La galaxia de Andrómeda o M31 es el objeto visible a simple vista más lejano de la Tierra. Está a 2,5 millones de años luz de nosotros, pero se acerca a 300 km/seg. Se calcula que en unos 3000 millones de años podría colisionar con nuestra galaxia. Es la más grande de las galaxias del Grupo Local, formado por unas 30 pequeñas galaxias, además de las tres grandes galaxias espirales: Andrómeda, la galaxia del Triángulo y la Vía Láctea.

Objetos visibles en el cielo en septiembre

Esta es una lista de algunos de los objetos celestes más brillantes e interesantes que se pueden ver en el cielo nocturno de septiembre.

Los objetos están agrupados en tres bloques. Los que pueden ser visibles fácilmente a simple vista, sin prismáticos ni telescopios, los que pueden verse fácilmente con prismáticos y los que para poder verse requieren de un telescopio.

Hay que tener en cuenta que todos los objetos, excepto las estrellas, aparecen más impresionantes cuando se ven a través de unos prismáticos grandes o de un telescopio.

Consejos para la observación del cielo nocturno

Al observar el cielo nocturno, y en particular los objetos de cielo profundo, como cúmulos estelares, nebulosas y galaxias, siempre es mejor hacerlo desde un lugar oscuro. Evita la luz directa del alumbrado público o de otras fuentes. Si es posible, se debe observar desde un lugar oscuro lejos de la contaminación lumínica que rodea a la mayoría de las grandes ciudades hoy en día. Podrás ver más estrellas cuando tus ojos se hayan adaptado a la oscuridad, por lo general, alrededor de diez a veinte minutos después de haber estado expuestos a la luz.

Si se necesita utilizar una linterna para ver un mapa del cielo, se debe cubrir la bombilla con celofán rojo. También podemos comprar linternas con luz roja que se pueden encontrar fácilmente en las tiendas.

Para finalizar, a pesar de que la Luna es uno de los objetos más impresionantes para ver a través de un telescopio, su luz es tan brillante que ilumina el cielo y hace que muchos de los objetos débiles sean más difíciles de ver. Por ello es conveniente observar el cielo nocturno en las noches sin luna, preferiblemente en Luna Nueva o en Cuarto Menguante.

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